Queridos
hermanos:
Con la llegada
del Domingo de Pascua concluye
una Semana Santa de las más
completas y esplendorosas de los
últimos años.
He querido
esperar hasta este día para
agradeceros a todos y cada uno
de los que habéis participado,
de una u otra manera, en la
Estación de Penitencia. Y cuando
digo a todos tengo en mi corazón
a todos cuantos formasteis parte
de la Cofradía el pasado
Miércoles Santo. Todos, desde el
fiscal de Cruz de Guía hasta el
último músico de la banda del
paso de palio.
Mi más sincero
agradecimiento al cuerpo de
nazarenos, eje fundamental de la
Estación de Penitencia, por su
comportamiento en la calle que
mejora año tras año. La llegada
al Templo en largas filas de
nazarenos con los morriones
puestos fue digno de admiración.
Mi felicitación personal al
cuerpo de acólitos, capataces y
costaleros, diputados, músicos,
personal de comunicación,
fotógrafos, auxiliares y
servidores.
De igual modo mi
agradecimiento al equipo de
vigilantes y a las fuerzas y
cuerpos de seguridad por la
cobertura y la protección que
nos dieron el pasado Miércoles
Santo.
Es para mí un
gran honor ser vuestro hermano
mayor y estar al frente de esta
gran Hermandad. Y cómo no, me
vais a permitir que tenga un
especial agradecimiento a mi
junta de gobierno por el apoyo y
el trabajo incansable, durante
meses, que supone poner una
cofradía como la nuestra en la
calle.
Hermanos, tened
por seguro que hemos vivido uno
de los mejores Miércoles Santo
que se recuerdan. La Virgen de
la Victoria y el Señor de la
Humildad repartieron infinidad
de gracias y bendiciones entre
el clamor, el gentío y el cariño
de toda Huelva. Ellos, ahora, os
esperan durante el resto del año
en sus hornacinas para seguir
recibiendo vuestras plegarias y
vuestras oraciones.
Gracias a todos y
un fuerte abrazo de vuestro
hermano mayor..
Tomás Díaz García