Foto: N. H. D. José Ángel Márquez
En el día de hoy, festividad de San
Juan Pablo II, se cumplen cincuenta años del ingreso
de la hermana doña Cristina Pulpón en la Compañía de
Santa Teresa de Jesús.
La hermana Cristina es una ferviente
devota de la Reina del Polvorín a lo largo de toda
su vida. Tal es así que en sus años de residencia en
Huelva realizaba la Estación de Penitencia, en la
presidencia del paso de palio, vestida con el hábito
de nazareno.
Su amor por la Virgen de la Victoria
no conoce fronteras. De hecho, aunque hoy en día
reside fuera de nuestra ciudad, desde la lejanía,
continúa profesando un amor desmedido a su Virgen.
Por tal motivo y de todo corazón, el
Hermano Mayor y la Junta de Gobierno quieren
manifestar sus mejores deseos a la hermana Cristina
en sus bodas de oro como Teresiana.
Que la
Santísima Virgen de la Victoria y Jesús de la
Humildad le colmen siempre de gracias y bencidiones.