A lo largo del pasado
besamanos Le fue regalado a la Santísima Virgen de la
Victoria un brazalete de zafiros y diamantes, así como
un broche montado en plata de bisutería francesa por
parte de N.H.D. Juan Robles García.
De igual modo La
Virgen estrenó para este anhelado día un rostrillo
adquirido en un anticuario conformado por una blonda de
punto de agua de seis metros del siglo XIX, que ha sido
donado por N.H.D. Jesús Fernández Aguado.