Como ya hiciera el Hermano Mayor tras finalizar la Estación de Penitencia el pasado Miércoles Santo en nuestra Parroquia dirigiéndose a los allí presentes, la Junta de Gobierno de la Hermandad de la Victoria quiere dar gracias públicamente.

Gracias de corazón, en primer lugar, a todos los Hermanos de la Victoria, muy especialmente a todos los que participaron de su cortejo como nazarenos, enlaces y diputados, costaleros, acólitos, monaguillos, capataces, músicos, etc…

Las circunstancias meteorológicas condicionaron nuestra Estación de Penitencia a la Parroquia de la Purísima Concepción por lo que cumplir los objetivos habría sido inimaginable sin el ejemplar comportamiento, compromiso y entrega de los Hermanos que han participado en la misma.

El esfuerzo que realizaron, la comprensión que demostraron y el cariño que, el Miércoles y como siempre, profesan por esta corporación, merecen nuestro reconocimiento y alabanza.
En momentos de dificultad, los Hermanos de la Victoria demuestran una enorme y entrañable capacidad de unión.

El Hermano Mayor y su Junta de Gobierno, en nombre de todos los Hermanos, también quieren hacer público su profundo y eterno agradecimiento por su colaboración al Consejo de Hermandades y Cofradías de nuestra ciudad, a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y Municipales, a la seguridad privada, a las Parroquias y Hermandades que nos ofrecieron su ayuda, a las organizaciones privadas que igualmente se ofrecieron a ayudar en todo lo que necesitásemos y a las personas, públicas y anónimas, que pusieron su granito de arena de la forma que fuese.

Gracias que hacemos extensivas a todos los onubenses y fieles que hicieron posible, con su comprensión y actitud, que el regreso de la cofradía a la Parroquia se efectuara en el menor tiempo posible.

Que Nuestro Padre Jesús de la Humildad, mediante la poderosa intersección de María Santísima de la Victoria, os colme siempre de gracias y bendiciones.